Delincuentes del barrio Puerto Viejo atacaron a un vecino que los había denunciado, entre otros hechos, el robo de luces de las calles.
Un vecino del barrio Puerto Viejo de Paraná denunció a los delincuentes que en las últimas semanas han robado en viviendas particulares así como las nuevas luminarias municipales. El hombre sufrió la venganza en un ataque en su propia casa de los mismos ladrones que siguen en la calle.
El hombre vive en una de las construcciones históricas ubicada frente a la plaza Le Petit Pisant (de la locomotora), o más precisamente al skatepark. Alrededor de las 20 del domingo estaba bañando a su hijo de seis años, cuando escuchó que desconocidos estaban a los gritos en la puerta vereda. Al atender, irrumpieron dos hombres y una mujer que lo agredieron y lo golpearon en la cabeza.
Las cosas que le recriminaban estaban directamente relacionadas a sus denuncias por los hecho delictivos que asolan la zona: “¡Qué venís a vigilantear!”, le decían, por ejemplo, detalló UNO.
Mientras forcejeaban y le seguían pegando, salió la madre del hombre, de 75 años, a intentar auxiliarlo.
Los agresores fueron acusados, entre otros hechos, por los robos de las luces LED recientemente colocadas por la Municipalidad, dejando las calles del barrio a oscuras.
El hombre radicó la denuncia de la brutal agresión del domingo a la noche en la comisaría Primera. La misma fue remitida a la Fiscalía, con los nombres de los acusados para que sean debidamente imputados.
Después, el hombre herido fue por sus medios a la sede del médico de Policía por calle Fraternidad que lo atendió en la vereda, desde la puerta. Entonces, como seguía perdiendo sangre, se dirigió al hospital San Martín donde recibió la atención adecuada.
Con información de Diario UNO.
