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Anses prepara pago del bono de $5.000 y define la próxima suba de jubilaciones

En septiembre caerá el tercer ajuste con la “nueva vieja” fórmula de movilidad. Los expertos estiman un alza de entre 9% y 12%, con la variación casi jugada ya que sólo falta conocer el dato de mayo de salarios de Indec

Mientras prepara para el 2 de agosto el pago del bono de $5.000 para los jubilados que cobren hasta dos haberes mínimos ($46.129), la Anses termina de definir el incremento de septiembre para sus beneficiarios, el tercero del año con la “nueva vieja” fórmula de movilidad. Los economistas estiman que el incremento estará entre un 9% y 12%, a partir del impulso de la recaudación y en menor medida por salarios que tratan de empardarle a la inflación.

El ajuste trimestral se rige en un 50% por los recursos tributarios que van a financiar al organismo previsional y el otro 50% de acuerdo al índice que mide la evolución de los sueldos que más haya subido: el Ripte que elabora el Ministerio de Trabajo o el del Indec que además contempla los del sector informal. En ambos casos, se toma el lapso de los tres meses previos.

Hasta ahora, de los datos que se tomarán como referencia sólo están completos los de recaudación, para el período marzo-junio. Como esta variable se compara de forma interanual con los peores meses de 2020, cuando estaban vigentes las restricciones más duras, empujará hacia arriba ese componente, dado que los ingresos del fisco llegaron a marcar un salto de más de 100% en abril.

En cuanto a los salarios, según el Indec aumentaron 5% en marzo y 3,2% el mes siguiente, en tanto recién el viernes 30 se dará a conocer la última variación de cierre del trimestre.

Por su parte, el Ripte -que contempla solamente la remuneración promedio de los trabajadores estables- arrojó una suba de 4,9% en marzo, 6,2% en abril y 1,2% en mayo, quedando así durante el último mes por debajo de la inflación.

Es decir que la suerte del próximo porcentaje de aumento está casi echada, ya que sólo resta conocer la variación salarial de mayo que mide el Indec para definir si se utilizará ese indicador o el de la cartera conducida por Claudio Moroni.

En base a estos datos, el economista de la Universidad de General Sarmiento (UNGS), Sergio Rottenschweiller adelantó que la actual fórmula arrojará una movilidad del 12% en septiembre, similar a la de junio, al tiempo que proyectó otro ajuste del 9% en diciembre. Así, los haberes finalizarían el año -sin contar los bonos- un 48,6% por arriba de 2020, en línea con la suba de precios, si es que se desacelera del 50% interanual que marcó en junio. “De todas formas esto no implica que en el promedio del año, no hayan perdido”, aclaró el especialista en seguridad social.

Menos optimista, un informe de la consultora Equilibria vaticinó un alza en jubilaciones del 45% para todo el año, con incrementos de entre 9% y 10% tanto en septiembre como en diciembre. La flamante firma de Martín Rapetti y Diego Bossio advirtió por el “rezago” que genera el esquema actual “que afecta a los haberes negativamente cuando la inflación se acelera y positivamente cuando el alza de precios se modera”, algo que también ocurría con las movilidades anteriores.

De todas formas, un reporte de la Universidad de Avellaneda planteó que en el primer semestre, todas las prestaciones que paga la Anses subieron un 21%, contra el 18% que otorgaba la anterior fórmula macrista, que se regía un 70% por IPC y un 30% por salarios formales. Así, junto a los bonos de $1.500 otorgados en la primera parte del año a quienes cobran la mínima, permitió una suba del 1,5% por encima de la inflación.

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