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Colectivos: en Paraná se viaja peor, se espera demasiado, se paga carísimo

Es mediodía de un miércoles ardiente y en la esquina de Gualeguaychú y Monte Caseros hay una parada de colectivos que concentra varias líneas y por eso no es extraño ver a muchas personas arremolinadas allí.

Cruzando Monte Caseros, sobre Gualeguaychú, hay otra parada, apenas señalizada, en una vereda angostísima, muy comercial, que obliga a peatones y pasajeros en espera a hacer malabares en la disputa por el espacio. Un adolescente se hace lugar y pone la llave en una puerta de medidas mínimas que conduce a un primer piso. Un remis se detiene a bajar a un pasajero pero un bocinazo de tribuna lo obliga a moverse rápido.

Llega el interno 54 de la Línea Nº 3 de la empresa Transporte Mariano Moreno SRL –son dos las que tienen la concesión del servicio en Paraná; la otra es Ersa Urbano SA-: es un colectivo literalmente atado con alambres. En el techo asoman remiendos para evitar filtraciones de lluvias; en el frente, le falta un bocado de carrocería, y la chapa patente sobrevive a duras penas; abajo, en la parte delantera,  cuelga un foco de alguna parte de la iluminación, y al pie de la escalinata de la que ascienden los pasajeros hay restos de follaje. Es como si una torcaza hubiera construido su nido allí. Pero no. Es otra cosa.

Así, siempre.

Adentro, hay tierra de épocas pasadas, sillones que se bambolean, desprendidos de su base, y muchos, muchísimos pasajeros adiestrados en el arte de adivinar en qué momento pasa el colectivo, cuándo se da la suerte, cuándo la resignación.

Un informe que publicó La Garganta Poderosa da cuenta que Corrientes capital pasó a tener el precio más alto en la región y uno de los boletos más caros a nivel nacional: $96,50. “Somos muchos los que tenemos jornadas laborales de doble turno, necesitamos cuatro pasajes diarios en el día, llegando a gastar $2.000 por semana en transporte”, dice el reporte publicado.

Y detalló que dentro de la región, Formosa es la segunda provincia en tener el boleto más caro: $84.

Paraná quedó en el podio, con un  boleto a $94,50. En Santa Fe, donde opera la misma concesionaria que en Paraná, Ersa Urbano, el boleto está a $85.

La nueva tarifa fue votada por el oficialismo en el Concejo Deliberante de Paraná a finales de diciembre y entró en vigencia en la primera quincena de enero de 2023.

Pero el aumento –pasó de $72 a $94,50- no derivó en ninguna mejora en el servicio. Con el argumento del receso escolar, Buses Paraná, la unión transitoria de empresas que tiene la concesión del servicio, aplica desde principios de año un diagrama de emergencia, y las frecuencias, ya de por sí muy espaciadas, se tornan imposibles para el pasajero.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora

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