La ex presidenta Cristina Kirchner apoyó a los gremios docentes en medio del conflicto que los enfrenta con el Gobierno al pedir una paritaria nacional, conflicto que se evidencia fuertemente en la provincia de Buenos Aires y que suma ocho días de paro.
Mediante Telegram, Cristina condenó anoche a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal , tras sus declaraciones en conferencia de prensa en las que pidió a los maestros no mezclar política con reclamo y en las que los exhortó a los dirigentes gremiales a expresar a qué partido político pertenecen.
Sin mencionarlo, Vidal apuntó contra el titular de Suteba, Roberto Baradel: “En los últimos años algunos dirigentes gremiales, que forman parte de la negociación, han hecho públicos sus apoyos al gobierno anterior. Es hora de que se sinceren y digan si son kirchneristas”.
Cristina dijo que “el gobierno de la provincia de Buenos Aires envió policías a las escuelas bonaerenses para identificar a los docentes que adhirieron al paro y exigir a los directores de los colegios que abrieran las puertas de las instituciones”.
Indicó que “en dos escuelas de La Matanza y en una tercera de Benito Juárez los efectivos pidieron los nombres y la filiación de los docentes que adhirieron al paro por 48 horas convocado por el Frente Gremial Docente”, información que le atribuyó a una nota del diario Página/12.
La ex mandataria calificó el hecho como “una barbaridad” y se remitió a un tuit de Alberto Fazio, un dirigente del PJ que calificó el pedido de la gobernadora como “uno de los hechos más graves para la democracia desde el 83 a la fecha”.