Todo indica que hay altas chances de que esta primavera El Niño vuelva a visitarnos. Este fenómeno, que en pocos años saltó a la tapa de los diarios, puede traer impactos muy severos en nuestro país, como ocurrió en 2015/2016, con las inundaciones en amplias zonas de nuestro país.
Seguramente El Niño dará mucho que hablar, y para que estés informado, te contamos algunos datos clave para que comprendas este particular fenómeno.
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Según el Boletín El Niño/La Niña hoy de la OMM, la probabilidad de que se produzca un episodio de El Niño de aquí a finales de la primavera 2018 es del 70 %.
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Ocurre cuando el agua del Océano Pacífico ecuatorial aumenta su temperatura, se extiende hasta el continente americano y llega hasta las costas de Perú.
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El Niño se inicia cuando el calentamiento del agua iguala o supera en 0.5°C a las temperaturas normales, durante cinco meses consecutivos.
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El agua caliente actúa como una gran hornalla que calienta el aire y aumenta la evaporación. La energía agregada a la atmósfera altera la circulación del aire en todo el mundo
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Es una variabilidad climática natural con efectos que pueden durar varios meses o pocos años. Combinado con otras oscilaciones, su impacto puede potenciarse o atenuarse.
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Es un fenómeno variable que no tiene un ciclo definido. Históricamente, su aparición se observa en períodos que van entre 2 y 7 años.
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El Niño puede modificar el comportamiento de la temperatura y de las lluvias, pero generalmente los impactos no se observan en todo el país. Sus efectos son frecuentes en el litoral y centro- este de Argentina
¿Por qué se llama El Niño? ¿Qué otros fenómenos afectan en los impactos que puede tener? Miralo todo en Oscilaciones: el mundo en movimiento
