Según confirmaron fuentes policiales, tras los procedimientos, se procedió al secuestro de armas de fuego y municiones de distinto calibre, teléfonos celulares, computadoras, elementos de corte y armado, envoltorios para comercialización, además de marihuana y cogollos, indicó diario El Día.
Investigación
La orden judicial de la fiscal Martina Cedrés ante el Juzgado N° 1 a cargo del juez Tobías Podestá, estuvo basada en la investigación iniciada hace varios meses en el marco de la Ley de Narcomenudeo y que arrojara resultados positivos hace poco más de un mes, donde además del secuestro de drogas, elementos para su comercialización y casi medio millón de pesos, se detuvo a 11 personas, incluido el sindicado como jefe de la banda que operaba en el norte de la ciudad.
De los nueve allanamientos realizados en los barrios San Isidro, Quijano y La Cuchilla participaron unos 100 efectivos de Guardias Especiales y Toxicología de Islas del Ibicuy, Rosario del Tala, Gualeguay y Concepción del Uruguay.
Apoyo de un policía
La organización contaría además con el apoyo de un funcionario policial, quien cumpliría la función de protección, alertando sobre los posibles allanamientos u operativos de sus propios colegas. El policía, de unos 40 años y que se desempeñaba en la División Toxicología, había sido trasladado hace un tiempo a otra jurisdicción, informó Radio Máxima. Este sábado fue uno de los seis detenidos.
Dos prófugos
Teléfonos celulares, computadoras varias, armas y municiones, además de los elementos que se utilizan para el fraccionamiento y venta de drogas al menudeo. Dos personas con pedido de detención no se encontraban en las viviendas y son buscadas por personal policial.
El próximo lunes la fiscal Cedrés llamará a cada uno de los seis a prestar declaración y tal como sucedió con los once detenidos en junio, seguramente solicitará la prisión preventiva para cada uno de ellos.
