El Centro Raul Alfonsín de la UCR advirtió que una obra que lleva adelante la Municipalidad de Paraná con financiamiento del Ente Nacional de Obras Hidráulicas y Saneamiento Ambiental (Enohsa) se encaró sin haber convocado a licitación, “solo vía concurso de precios con la excusa de la situación de emergencia por la pandemia y con la meta de solucionar este tema en el menor tiempo posible”.
Se trata de la construcción de 10 pozos semisurgentes para la provisión de agua salada con un presupuesto de $48 millones.
La obra, según la información oficial, comprende la construcción de un pozo semisurgente en ruta provincial N 11, Avenida de las Américas Kilómetro 5 y ½; otros dos en la intersección de calles Gobernador Mihura y María Wybert, correspondiente al centro de distribución Parque del Lago; un pozo semisurgente en el barrio Paraná V, en calle Artigas y Santos Domínguez; y otro en la intersección de calles Lola Mora y Alfonsina Storni, donde se encuentra el centro distribuidor de agua potable Lola Mora del barrio Lomas del Mirador.
Los restantes estarán, dos en la intersección de calles General Espejo y Leopoldo Lugones, lugar donde se emplaza el centro de distribución de agua potable Ejército; y tres nuevos pozos en la intersección de calles Miguel David y Antonio Salellas, del Parque Industrial General Manuel Belgrano.
La Subsecretaría de Obras Sanitarias de la Municipalidad de Paraná tuvo a su cargo la confección de la memoria descriptiva, pliego de condiciones particulares, pliego de especificaciones técnicas generales, presupuesto oficial y planos de la obra.
El objetivo, ha dicho la Municipalidad de Paraná, “es resolver los problemas que el servicio presenta especialmente en verano y además, prevenir contingencias como la bajante extraordinaria del río a la que estamos asistiendo”. La obra, producto de las gestiones del Municipio frente a la Nación, tendrá financiamiento del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa).
Pero desde el Centro Raúl Alfonsín de la UCR pidieron conocer más de esa obra. “Hoy está a la vista que no era tan urgente. Originalmente tenía un plazo de 60 días hábiles pero lleva un atraso de 6 meses en su ejecución”, destacó el concejal Walter Rolandelli.
Desde el Centro Raúl Alfonsín remarcaron también el impacto ambiental negativo de la obra. “Es totalmente nociva a la salud de los vecinos y el equilibrio ambiental. Lo advertimos en su momento diciendo que era un gasto innecesario, que hacía retroceder 100 años a la ciudad y que había otras soluciones más duraderas en el tiempo y lamentablemente no nos escucharon. De hecho, observamos que de los 10 pozos perforados, solo uno funciona, mientras que los otros 9 se encuentran en estado de abandono”, agregaron.
“Así, llegamos al verano, sin pozos, con media ciudad sin agua y una obra que deja más dudas que certezas”, sostuvo el concejal Francisco Avero.
“Le solicitamos al Intendente explicaciones sobre qué pasa con la obra y que escuche a los vecinos que le han presentado firmas para suspenderla, exponiendo las graves irregularidades de la misma”, pidieron desde el Centro “Raúl Alfonsín” de la Unión Cívica Radical.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora
