El 3 de diciembre de 2015, a siete días de terminar la gestión de Blanca Osuna, en forma bochornosa Abelardo Llosa bajo la complicidad de Carlos Molina, se firmó entre gallos y medianoches la habilitación de un loteo
Dicho loteo fue pedido por I. Gebhart representante del Colegio de Bioquímicos, hijo del R. Gebhart presidente del organismo y hermano de Pedro Gebhart secretario de producción de la provincia.
Este loteo no tenía ningún tipo de estudio de suelo previo y es bien sabido que C. Molina no era ajeno a la situación ni a los millones de razones para que Llosa firmara a las apuradas a siete días del cambio de gobierno, como consta en la resolución publicada, la aprobación de un hecho tan importante y que acarrea un impacto ambiental grandísimo.
Cabe destacar que se trató de en un momento en que muchos de los departamentos municipales ya habían dado cierre a sus actividades, donde a los proveedores ya se les había avisado que debían cobrar antes del día diez por el cambio de firmas, y que, sin embargo, para aprobar el negocio inmobiliario millonario las actividades de la Secretaría de Infraestructura funcionaron normalmente y por sobre todo. El secretario del área Guillermo ¨Willy´ Federik estaba pintado por lo que Molina y Osuna se manejaba directamente con Llosa quien era el subsecretario de infraestructura.
En la nota se aclara además que la empresa encargada de la obra será Norvial Servicios S.A. del ingeniero agrónomo Leonardo Damonte, quien acarrean un lapidario antecedente al ser condenado por estafas al Estado y que la obra se realizaría en la zona del Acceso Norte de la ciudad. En este sentido, resulta imposible creer que Molina, Llosa y Gebhart ignoraran que Damonte no era ninguna garantía ya que, en el ambiente en que se movían los empresarios y funcionarios, todo se sabe y se comenta. Además la aprehensión del ingeniero se trató de un hecho de repercusión pública sumado a sus antecedentes en La Paz.
El escandaloso loteo de Acceso Norte se encuentra ubicado en una zona de bañados y cañaverales, que regularmente se inunda ante las precipitaciones y cuya problemática se acrecienta aún más con el agua proveniente de la urbanización. Donde la mayoría de los terrenos están al menos a 10 metros por debajo del nivel asfáltico, casi imposibles de rellenar y cercanos a lagunas y un arroyo que empeoran la situación de los vecinos de barrios aledaños. Además de los daños, la urbanización provocaría más gastos al Estado por la recolección de residuos, limpieza, etc.
Sin embargo, se sabe que el aceite utilizado por la maquinaría que llevó a Llosa a firmar la aprobación del loteo se renueva. Porque si bien no existe hasta el momento una firma por parte de Varisco que avale la decisión de la anterior gestión, tampoco hay ninguna que lo frene de su parte ni de ningún área municipal, muy a pesar de las quejas de los vecinos.
Estos terrenos se encuentran a unos 3 minutos de la ciudad y fueron comprados por la suma de $1.000.000 a causa de ser inundables y planean ser vendidos por unos $400.000.000 convirtiéndolos en un más que millonario negocio inmobiliario, sin importar los futuros problemas que traerán a la zona ni si se arruinan los sueños de miles de familias que anhelan con su casa propia en aquel lugar.
Lo que genera graves sospechas sobre la actitud de funcionarios que se enriquecen a costa de los ciudadanos. Muchas veces, ocultos detrás de la hipócrita excusa de que se trata de una importante obra para Paraná cuando en realidad es todo lo contrario.
Recordemos que el gobernador Gustavo Bordet parece haber puesto mano firme con el tema de los loteos en la Asamblea Legislativa pasada en la que afirmó que ya se enviaron proyectos de ley a la legislatura para terminar con los negocios inmobiliarios en los que “se burla y se estafa la ilusión de muchos entrerrianos que quieren su vivienda propia”.
A este tema se refirió la responsable de Vialidad Alicia Benítez en comunicación con R.D 99.1 y el Portal de Ricardo David y confesó que hasta el momento Vialidad no comprende cómo se comenzó el loteo puesto que de parte de la municipalidad jamás se recibieron los documentos que comprueben los estudios necesarios para este tipo de emprendimientos, mucho menos una habilitación oficial. Quienes deben controlar la situación desde la municipalidad no lo han hecho.
En este sentido, Vialidad ha tenido que intervenir ante el reclamo constante de los vecinos que se ven perjudicados y además porque, en caso de que el loteo continúe, el desagüe que se utilizará para el desagüe del caudal de agua contenido allí, sería un desagüe perteneciente a Vialidad, lo que dejaría a la institución como responsable de las decisiones municipales a cargo de Llosa desde la gestión de Osuna y que parecieran continuar hasta el momento.
Sin embargo, el contexto mayor en el que se producen estas reacciones no permite albergar demasiadas esperanzas ya que, el caso Damonte viene produciendo justificaciones, ocultamientos y beneficios aún después de una condena. ¿Cómo puede ser posible que una empresa que se ha comprobado que estafa al Estado vuelva a ser contratada por este?
Algo huele muy mal en los loteos de Acceso Norte. Bien sabido es que en la Argentina las evidencias de la alta corrupción fueron casi siempre barridas bajo la alfombra pero como ya lo dice el dicho, más vale tarde que nunca. La justicia no puede ignorar la situación. En un contexto en el que la corrupción gubernamental es uno de los temas más hablados en el país y también en la provincia, resulta necesario dejar atrás la actitud de hacer la vista gorda con negocios millonarios que no hacen más que joderle la vida a la gente.
LA VOZ 90.1
