Desde el Arzobispado de Paraná se informó este jueves que monseñor Juan Alberto Puiggari realizó la bendición de un nuevo oratorio en el Hospital San Martín de Paraná. Grata noticia para los pacientes allí internados como así también para sus familias que desde siempre han contado con la posiblidad de orar, en tiempos difíciles, a la Virgen de la Medalla MIlagrosa.
“Está comprobado que lo espiritual hoy se considera como un elemento fundamental. Hoy hablamos mucho de la salud integral y la fe del paciente es fundamental y, este espacio, es muy importante para los enfermos y los familiares que necesitan un lugar de consuelo y desahogo y, también, para los trabajadores que necesitan encontrar la fuerza de Dios”, expresó monseñor Juan Alberto Puiggari, al momento de la bendición del nuevo espacio.
Este lugar se habilita de manera temporal hasta la realización de un espacio definitivo que contará también con lugar de residencia para el capellán destinado a la atención espiritual de la comunidad hospitalaria.
Según indicaron desde el Arzobispado de Paraná, el año pasado las autoridades del Hospital San Martín decidieron ocupar las instalaciones donde funcionaba la Capilla Virgen de la Medalla Milagrosa para destinarla a la apertura de consultorios. También se tomó el espacio que utilizaba el capellán Daniel Rodríguez como vivienda, y todo fue afectado de forma temporal a la atención de pacientes.
“En el mes de junio del 2021, el Ministerio de Salud de la Provincia de Entre Ríos clausuró en el Hospital San Martín de la ciudad de Paraná, los espacios edilicios en los que funcionaban los servicios de Ginecología y Gastroenterología. La razón estaba en las fallas estructurales del subsuelo de los mismos, que implicaban un serio riesgo de derrumbe del sector. Por dicha razón, se pidió de modo urgente, desde el Ministerio de Salud al arzobispo, monseñor Juan Alberto Puiggari, desocupar el espacio que ocupaba el Oratorio Virgen de la Medalla Milagrosa, sito en el nosocomio, para instalar en ese lugar los servicios afectados y darle continuidad a la atención de salud de las personas concurrentes. Inmediatamente se accedió a la solicitud, con el compromiso escrito del Ministerio de Salud y del Hospital San Martín, en la persona de su Director, de dar otro espacio para la atención del servicio religioso con la mayor prontitud posible”, señalaron.
Si bien la feligresía paranaense pidió rápidamente un nuevo espacio para el socorro espiritual, la pandemia complicó las acciones.
“A mediados del año 2021 todavía estaban vigentes importantes restricciones de movilidad y de cuidado personal y social, por lo que la ejecución de la medida no fue sin dificultad. En este sentido, el presbítero Daniel Rodríguez, capellán residente del Hospital, tuvo la generosa disponibilidad de organizar su traslado personal, ya que quedaba sin lugar de residencia, así como los muchos elementos de la capilla”, señalaron desde el Arzobispado.
“En la ejecución del traslado, la comprensión recíproca del esfuerzo que implicaba el importante movimiento incluía el compromiso de volver lo antes posible a la atención religiosa desde un lugar fijo u Oratorio en el Hospital, así como se había desarrollado durante tantos años incluso con la residencia del capellán en el lugar”.
Esfuerzos compartidos de capellanes, sacerdotes, directivos de salud y del hospital lograron que se consiguiera este diciembre de 2022 un espacio de fe y se piense en más avances.
“En primer lugar se dispone de modo provisorio de un espacio en el sector nuevo del Hospital para la instalación de un oratorio, con la presencia de la imagen de la Virgen de la Medalla Milagrosa. Este espacio religioso ha sido bendecido en la mañana del jueves 22 por monseñor Puiggari, con la presencia de las autoridades de salud”, hizo saber el Arzobispado que añadió: “En segundo lugar se avanzó en la realización de un proyecto de Oratorio ya definitivo en el ‘espacio verde’ del Hospital, con habitación para el capellán residente, a concretarse en el transcurso del 2023. El mismo contará con los recursos necesarios para la atención religiosa y caritativa de todos los pacientes del Hospital que lo pudiesen requerir”.
Para finalizar, el comunicado del Arzobispado indicó: “Todo lo precedentemente expresado, que ayuda en la memoria de la presencia eclesial en el Hospital, abre a la esperanza en la adecuada continuidad del servicio religioso para el bien de las personas que se encuentren, como pacientes y como familiares, en la situación de angustia y dolor por la enfermedad”. UNO
